sábado, 3 de marzo de 2012

Hay que encontrar una solución

Al llamarse descargas ilegales en un primer momento para tener una visión general del concepto hay que tener en cuenta muy bien el segundo término: ilegales.
Cuando algo lleva implícita la palabra ilegal, independientemente de nuestra opinión, hay que saber que es una acción que al realizarla estará siempre mal hecha.
Y ahora, partiendo de esa base, eres tú ya el que tiene que decidir si vas a realizar o no este acto.
A mí me gustaría disponer del dinero suficiente para poder comprar todos los discos, películas y libros que me gustan, pero como muchas otras personas que están en mi situación, dependemos del dinero que nos dan nuestros padres, y entonces no siempre tenemos dinero para poder comprarlos, por lo que muchas veces te ves tentado a descargar estos archivos directamente de internet, ya que es la única manera por la cual vas a poder disfrutarlos.


Me pongo a mirar desde el punto de vista de los autores y pienso que debe de ser muy frustrante que un proyecto que te ha costado mucho trabajo y esfuerzo realizar no sea recompensado, y que hagan copias y copias de él sin tu permiso no es lo que te gusta que suceda.
Pero si yo fuera dicha autora, intentaría encontrar algún tipo de solución.
Sé que es muy difícil decir por ejemplo: voy a bajar el precio de mi libro, y así más gente podrá acceder a él, y por supuesto de una manera legal.
Tal vez esta sea podría ser una posible solución.
Intentar calmar un poco nuestro deseo de querer siempre más y más.
Y así, de ese modo, más gente podrá disfrutar con lo que yo amo hacer.